26/03/2022
La tecnología blockchain permite digitalizar el seguimiento de todo lo imaginable, contratos, contactos, trabajo hecho, facturas, etc. Este registro registra todas las transacciones y acuerdos celebrados, así como sus sucesivas actualizaciones o modificaciones. A diferencia de trabajar con una aplicación tradicional, los contratos inteligentes pueden programar un flujo de tareas preestablecido entre las partes interesadas con el apoyo de todas las garantías de confianza y transparencia que ofrece esta tecnología.
La mayor virtud de los “smart contract” son la transparencia, trazabilidad, inalterabilidad y eficiencia. Por tanto, son ideales para tratar circunstancias relacionadas con la relación laboral trabajador-empleador, como la administración de licencias, la ejecución de testamentos, la adjudicación de licitaciones, la gestión de contratos de trabajo, suministro, fianzas, derechos de propiedad intelectual y mucho más.
Gracias a la naturaleza de Blockchain, la información sobre disposiciones o transacciones se puede rastrear hasta que llega a sus propietarios y las partes pueden verificar el cumplimiento de sus términos. Además, al usar firmas electrónicas y estar disponible en línea, no es necesario viajar a una ubicación común, lo que también requiere costos de transacción más bajos. En cada etapa de la liquidación de cuentas, se crea un "bloque" con toda su información relevante, como si fuera una nueva hoja de un libro de contabilidad que sucede a la anterior. Al ser un registro descentralizado, estas entradas no pueden ser alteradas, modificadas, sustraídas o desaparecidas.
El desarrollo y adopción de esta tecnología ofrece importantes beneficios a los profesionales del derecho. En el derecho contractual argentino, la regla general es la libertad de las formas y de las partes para determinar el contenido del contrato siempre que no afecte las normas imperativas. Garantizar que se respeten los beneficios en una transacción da como resultado menos litigios y una descompresión de los medios tradicionales de resolución de disputas. A su vez, esto implica una menor ambigüedad a la hora de aplicar la letra del contrato, ya que la ejecución no depende de las distintas interpretaciones de las partes implicadas, reduciendo el labor de los intermediarios.
Estas tecnologías e innovaciones ya son una realidad y conllevan un poder de transformación para todo el universo jurídico. La digitalización de nuestro trabajo tiene un gran impacto y nos permite no solo optimizar el tiempo de trabajo y los recursos asignados, sino también garantizar una mayor eficiencia, transparencia y escalabilidad. La revolución digital necesita que evolucionemos con ella.
Fuente:
https://www.ambito.com/opiniones/blockchain/y-la-evolucion-del-mundo-legal-n5386639